El amor; la fuerza más poderosa que tenemos.

Y vamos por la vida en un acelere que: ¿merece la pena?, merece la pena llenarnos de actividades, de prisas, de citas, de trabajo y/o trabajos, de pendientes, de clases para los niños, de rutinas, de cosas materiales, de consumir, de cualquier pretexto para distraer nuestra mente y sobre todo nuestra alma para ir por la vida sin detenernos ni un minuto y no sentir ese AMOR que vive en nosotros?.

Merecemos si o si un momento, unos minutos de hacer esa prometida pausa y pasar tiempo con nosotros, con nuestra alma, con nuestra escencia.

Preguntarnos cómo estamos, cómo nos sentimos y qué necesitamos. Somos lo más valioso que tenemos y, sin embargo, somos lo último a quien volteamos a ver y a preguntarle: ¿cómo estás, cómo te sientes, qué necesitas hoy?.

Y de ahí, de esa conexión con nosotros mismos, de voltear a ver el gran ser que somos y de lo que estamos hechos, de agradecer todo lo que tenemos y lo que somos; viene esa fuente tan poderosa que nos hace engrandecernos, nos hace brillar y nos hace conectar con todo lo demás de la misma forma tan poderosa y fuerte que sentimos ese AMOR vibrar en nuestro corazón y en todo nuestro cuerpo.

Así como cuidamos de los demás; nuestra pareja, hijos, familia, amigos, conocidos, mascotas y demás, así debemos de cuidarnos a nosotros mismos y de darnos toda esa atención necesaria, para así poder estar bien con nosotros y poder estar bien con los demás y con todo lo demás.

Es claro que si no te amas a ti, no puedes amar nada ni a nadie, porque habrá simplemente un vacío que nadie podrá llenar y ese vacío es esa incomodidad que te hace sentir que nada va.

Así que hoy; me tomo un momento para preguntarme: ¿cómo estoy?, a mí me sirve escribir y llevar un diario, cuando escribo y pongo en papel lo que siento, logro hacer consciente lo inconsciente :).

Te invito a que lo hagas y también te invito a que agradezcas todas las mañanas todo lo bueno que tienes y el GRAN SER QUE ERES.

Y QUE SIEMPRE, SIEMPRE SEAS MUY FELIZ.